Con dos pistas para correr y una longitud de aproximadamente 4,8 metros, este túnel de agua tiene suficiente espacio para que dos niños jueguen al mismo tiempo. En el fondo de los colores, además, se puede apreciar la imagen aérea del distrito del Eixample, una de las principales arterias de la Ciudad Condal. En 2005 hicieron lo propio con Cuba, donde realizaron su pretemporada, que se coronó con un partido entre el Sankt Pauli y la selección de la isla rebelde, a través del cual los bucaneros pretendían expresar su solidaridad con el gobierno de Fidel Castro.