Con este estilo de juego, Cruzeiro hizo su debut en la libertadores contra el equipo de Estudiantes de La Plata que derrotó al Cruzeiro en la final de la Libertadores de 2009. Cruzeiro goleó 5-0 al equipo argentino, con una actuación casi impecable de todo el elenco, vengando así la pérdida del título de 2009 y postulando a Cruzeiro como el favorito para ganar el torneo.